VERBO ENCENDIDO
Disparando a las entrañas del ser
acciona de prisa sin tiempo a recoger
pedazos dejados por tormenta inesperada
De la palabra dada a granel
dejando el ambiente pesado y húmedo
que trasciende a la arcilla fresca
Mientras desde mi cómplice ventana
escucho el sonido de la reflexión y la calma
que me invita a pensar, vivir y soñar
Olvidando el verbo pesado y añejo
que intentaba apagar su brillo natural
de la magia de la fe y del amar
para seguir derramando ilusiones y mieles
que despierten en las almas los quereres
y estremecer sus pieles hasta el mismo Edén
Espero en mi balcón a solas observando
que siga la esencia de mi alma su luz
es ella la que habla siempre en poesía.
Beatriz
20Agosto/2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario