La bocanada marina profunda
enardece en mi tu frescura,
encendiendo mi figura,
mientras disfruto de tu hermosura.
No habrá caricia
que no penetre,
ni labios que no
fueran correspondidos,
entre gozos serán saciados,
hasta que en ti
el dulce placer encuentre.
Humedecer en tus besos y ser tu aliento,
disfrutando del
exquisito momento,
bebiendo en la
piel de tu pasión,
y un dulce
orgasmo llegó.
©Beatriz Martín
26/08/17