viernes, 20 de septiembre de 2019

Relatos I Los Próceres





Relatos I Los Próceres

Corría los años 70, viajaba sobre las ruedas de un plateado amasijo de hierro, titulado patines, para descubrir unas torres de vértigo imponente, sus escudos, los héroes de la patria y custodiados por uniformados que inspiraban un profundo respeto, mientras los helechos de copas romanas dominaban mis sueños y sus leones de cemento inclinados al Rey del Paseo llamado Los Próceres.
Era el lugar mágico de mis sueños, en las noches donde el verano apretaba y la brisa jugaba con mis largos cabellos.


La algarabía no cesaba, el sonoro  ruido   de los chicles Bomba Fiesta, ese   pitillo rosado soberbio engalanaba a cualquier bolsillo de falda o jeen,  hacíamos con su presencia una piñata. las risas traviesas de los carajitos, pantalones cortos y tirantes de color diversidad, manifestándose sobre las mallas decorativas de mármol mamón, mamón, esa fruta hoy inalcanzable, para mi,  para ellos.


Pero mis cabellos querían ser jugando, mis patines rodando y mi corazón emocionado,  como un caballo desbocado al ver a lo lejos la silueta,    mi primer amor de corazones en los árboles, un hombre de uno 1,80 , moreno  de playa, cabello ondulado  castaño, mirada seductora solo tenía 17 años y yo unos 13  con sabor a Barbie, aún escondida detrás de las copas romanas, con mis cabellos jugando, a princesa de hadas.


 Jamás aquella silueta lo supo, solo mi memoria escondida entre las fuentes de cada cuadra, guardaban mi secreto. Esas fuentes vigorosas llenas de esperanza anunciaban mi castillo  dibujado en mi memoria.


©Beatriz Martín
20/09/ 2019